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Todos en algún momento hemos notado la boca seca, pero por qué se seca la boca. Lo que le ocurre a alguien que tiene la boca seca es que no tiene la saliva suficiente en la boca para mantenerla con la humedad normal. En muchas ocasiones los síntomas de boca seca han ido ligados a nuestro estado de ánimo como una situación de nerviosismo, molestias o tensión. Pero si la sequedad de boca es algo continuo habrá que poner atención en ello ya que puede acarrear serios problemas de salud o ser indicador de otras afecciones más importantes.
Y es que la saliva tiene unas funciones mucho más importantes de lo que creemos, ya que no sólo sirve para mantener la boca húmeda, sino que actúa para ayudar a digerir alimentos, evita infecciones al controlar las bacterias en la boca, posibilita masticar y tragar y protege los dientes contra las caries.
Causas de la boca seca
Para saber por qué se seca la boca vamos a ver cuáles pueden ser algunas de las causas de esa sequedad en la boca.
- Ingerir ciertos medicamentos. Son muchos los medicamentos que pueden producir sequedad bucal, entre ellos los analgésicos, diuréticos, medicamentos para la depresión y también para la hipertensión entre muchos otros.
- Enfermedades. También son muchas las enfermedades que pueden conllevar sequedad en la boca. Es el caso de la diabetes, párkinson, SIDA Y MUCHAS MÁS.
- Quimioterapia. Este tipo de tratamiento contra el cáncer pueden espesar la saliva y producir la sequedad bucal.
- Menopausia. Los cambios en los niveles hormonales afectan también a las glándulas salivales.
- Tabaquismo. La gran mayoría de los fumadores sufren de sequedad bucal.
Tratamientos para tratar la boca seca
Después de saber por qué se seca la boca ahora sabremos cómo combatirlo. La única manera de hacerlo es haciendo frente a sus causas. Si la sequedad de boca se debe a ciertos medicamentos deberá consultarlo con su médico para que, en la medida de lo posible, cambie la medicación. En el caso de que esta sequedad no pueda eliminarse, como dentistas aconsejaríamos el uso de humedecedores bucales y enjuagues bucales que puedan suponer un alivio.
Es aconsejable también beber agua frecuentemente y bebidas sin azúcar, masticar chicles sin azúcar y dejar el tabaco y el alcohol, entre otros.